Resumen del viaje a Israel: otium

Tuve la ocasión de visitar tanto Tel Aviv como Jerusalén, aunque de forma muy rápida en ambos casos (congreso obliga!). Como este no es un blog de viajes (que los hay muchos y buenos) tampoco haré más que dejar algunas fotos (por ahora "estándar", ya colgaré las que tienen "bichos" cuando las tenga disponibles) y algún breve comentario.



De Tel Aviv vimos básicamente Old Jaffa, la ciudad antigua, y un paseo por el paseo marítimo de Tel Aviv. Old Jaffa era bastante bonito, con pequeñas callejuelas intricadas con detalles que descubrir. Parece que hasta hace pocos años, era una zona totalmente deprimida, otra "capital del crimen", pero poco a poco ha ido redescubriendo antiguas glorias, aunque sea desde el turismo. Todavía les queda trabajo (sólo hace falta irse un par de calles hacia el interior para descubrirlo).




Jerusalén... creo que había muchos factores que determinaban el que no lo llegase a disfrutar: muchos aviones y viajes en este mes, cansancio acumulado, poco tiempo para "llegar al fondo", mucho calor, ... pero lo cierto es que esperaba más de Jerusalén, esperaba más espiritualidad, más "algo". Sin embargo, el resumen de ese día en Tierra Santa es "el mayor zoco que he visitado". Cada calle era una oportunidad para que decenas de tiendas con todo tipo de productos (camisetas, bagatelas, zumos, comida rápida, ...) se mostrasen de un sitio a otro. Por supuesto, ahí estaba el Muro de las Lamentaciones, o el Santo Sepulcro o, con un poco más de esfuerzo, la Cúpula de la Roca. Pero, excepto quizá en el Muro y en el Santo Sepulcro, cuando no había "zoco", encontraba "seguridad".

Pero no voy a criticarlo, cuando toda la gente que conozco que ha visitado Jerusalén me habla de otras cosas. Sencillamente, hace falta dedicarle más tiempo y más esfuerzo para disfrutar de la Historia con mayúsculas.

Ey, y una cosa buena es que después de tanto calor, Madrid, al fin y al cabo, no es tan caluroso! :)